19 de abril de 2024

NCN

Para que el ciudadano tenga el control.

Eduardo Romagnoli por un Estado de puertas abiertas

En el siglo XXI aún mantenemos una estructura educativa industrial

En un contexto educativo y social, que resulta una de las peores escenas de la historia nacional, con una carpa escuela Itinerante frente al Congreso Nacional, es necesario hablar de la educación que queremos, que hoy se desangra.

El sistema educativo actual está obsoleto, creado en la revolución industrial que no sufrió cambios significativos en varios siglos. Escuelas a puertas cerradas, verdaderos centros de encierro y familias afuera. Era, y es, el imperio del modelo de la revolución industrial productivista y estandarizada, modelo educativo despersonalizado.

Asimismo, hoy, tenemos un Estado despreocupado del modelo educativo en crisis, concentrado en ajustar, haciendo aguas al diálogo, que no cede ante reclamos, salarios sin actualizar con la inflación real y paros, chicos sin clases, docentes precarizados.

Debemos iniciar el diálogo sobre un nuevo sistema educativo contemporáneo

Ese modelo educativo debe basarse en el principio de la educación gratuita para todos los ciudadanos y de muy alta calidad. Es uno de los sistemas donde no podemos ahorrar.

Es una realidad, que se puede mejorar el sistema educativo de un país radicalmente y en tan solo una generación. Es una cuestión de inversión en nuestras escuelas, pero principalmente, maestros y profesores para que sean los mejores será cuestión de hacer de su profesión prestigiosa, y sistema de formación debe estar a la vanguardia y ser exigente.

Todas las variables deben estar en orden, pero deberemos concentrarnos en mejorar a nuestros educadores, su calidad de vida y formación deben ser ambas superlativas.

El salario como variable,  juega aquí un papel fundamental: sostenedor de todo el sistema educativo. Visto como bien de cambio, intercambio, no cómo “ la plata” ó “ por plata” con el que se ningunea a docentes hoy, para minimizar el reclamo y restarles valor, pretendiéndolos héroes de una hazaña perdida.

El modelo educativo, es un tema a debatir y planificar hoy, debe aggiornarse y seguir la tendencia de modelos más a la vanguardia del mundo, no mirar hacia atrás.

No obstante, no nos alcanzará. Como país subdesarrollado y con altos índices de pobreza, debemos pensar en un “desarrollo” integral y sustentable.

Cuando los niños regresan a casa, la familia debe contenerlos, dar continuidad al sistema perpetrado para que el resultado no se disperse y esfume. Esas familias que forman nuestra Argentina, deben estar bien. Para eso, debemos tener un estado que tenga como prioridad el Bien Común, de Todos, resolviendo cuestiones básicas, en orden de prioridades, en una mesa plural.

El estado debe reducir la desigualdad. Soluciones como salario mejorado, renta básica universal en un país con un tercio de pobreza y desempleo, para que nadie caiga en un permanente estado de pobreza como sucede hoy, forman parte del debate a dar hoy, por un sistema educativo integral, sustentable, saludable y evolución de nuestro sistema social.

Es tiempo de bajar la violencia y aumentar el diálogo VERDADERO. De sentarse a una mesa gobierno, sindicatos, oposición, empresas y padres, y construir la educación del siglo XXI.

Hablar de salario docente, presentismo, estado de escuelas, tecnología como nuevo actor en el proceso educativo y acordar cuatro puntos centrales:  1-Inversión en porcentaje del producto en Educación. 2- Modelo educativo para el siglo XXI. 3- Capacitación docente. 4- Nueva relación de la comunidad educativa: padres, alumnos y docentes.

El sistema educativo debe caracterizarse por una serie de principios: enseñanza obligatoria como instrumento de formación que promueve la democracia e igualdad para que la escuela pública sea una escuela unitaria donde no se separa a alumnos en función de, por ejemplo, sus aptitudes o procedencia social.

Las clases no solamente deben centrarse en conocimientos académicos, sino procurar que alumnos desarrollen una capacidad de diálogo y colaboración. Desde el preescolar se les debe enseñar a trabajar en grupos y solucionar problemas de forma pacífica y dialogante. Debemos también ser conscientes de que idiomas son fundamentales para el desarrollo profesional, e incorporarlos en la enseñanza obligatoria.

Además, y atendiendo a paradigmas educativos mundiales que marcan tendencia, debemos terminar con el sistema de premios y castigos del modelo actual, y del que se manifestó partidario el Gobierno Nacional, anacrónico y descontextualizado a tiempos y necesidades de niños, cuando el mundo avanza hacia la priorización de creatividad, elemento fundamental a desarrollar en niños, adolescentes y jóvenes.

La mesa del diálogo debe ser HOY. En el Congreso, donde están representadas todas las visiones e ideas de la Argentina. La educación es el único instrumento que genera igualdad de oportunidades.

El Gobierno Nacional tiene que dejar de hacer política con el conflicto, chicanas, división y extorsión y acccionar.

El ajuste no solucionó ninguna problemática ni económica ni social, el ajuste resiente el consumo y nos pone de cara a la recesión. Sucede lo mismo en educación. El estado tiene que ceder.

Acuerdo, consenso, son cruciales para avanzar, y que la coyuntura no tienda a un desequilibrio social.

El conflicto docente actual tiene su lógica en la rigidez estatal pero también debemos dialogar sobre la transición del viejo modelo educativo industrial hacia un nuevo paradigma educativo.

El problema educativo se resuelve con un Estado de puertas abiertas. El estado no es una empresa.

El futuro es hoy.

 

Por Eduardo Romagnoli

Presidente del Frente Renovador de Santa Fe

Empresario de la Producción y de las Energías Renovables

Presidente Energy Mercosur

Cavaliere D’ Italia

Proboviro Assocamerestero

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