La Confiteria del Molino comenzó su lento camino hacia la restauración
Este martes a las 16 en el Salón Delia Parodi, la comisión Bicameral que hace un seguimiento de la restauración de la Confitería El Molino firmará un convenio con la Ciudad Autónoma de Buenos Aires y la Nación para iniciar el camino final hacia la re-apertura del espacio que ahora pertenece al Congreso Nacional. Lo primero será la refacción de la fachada y estará a cargo de la Ciudad.
Lo que se firmará mañana es la concreción de un convenio de colaboración entre las tres partes, Congreso, Ciudad y Nación. De esta manera, quedará expresa la voluntad de los sectores actuantes en el trabajo conjunto que comenzará la próxima semana. Una vez que se firma este convenio, el gobierno de la Ciudad comenzará con la parte que le toca: La fachada.
Uno de los arquitectos que conforma el equipo de trabajo adelantó a NCN que la semana entrante se avanzará en los primeros movimientos de obra. Esto es, remover la estructura de andamios que se encuentra al frente del edificio, tarea que demandará cerca de 20 días. La restauración de la fachada correrá por cuenta del gobierno de la Ciudad, mientras que las otras dos partes no se ha determinado intervención ya que dependerá del avance de los planes que se elaboran.
El seguimiento seguirá en manos de la Bicameral que preside el diputado Daniel Filmus (FpV-CABA) y que, entre otros integrantes, tiene al presidente del cuerpo Emilio Monzó en su caracter de diputado nacional.
Por dentro del Edificio ya se viene trabajando hace tiempo con especialistas en restauración, e incluso, hay salones que tienen su renovación avanzada. «La estructura esta bien», comentó a NCN el arquitecto Ricardo Angelucci. Sin embargo, aún no se sabe si la restauración implica la recuperación de algunas paredes actuales o si hay que hacerlas nuevas. Eso dependerá de los primeros estudios luego de retirada la estructura.
Con respecto a los plazos de finalización de obra no se tienen estimaciones precisas. La obra demandará tiempo. Si bien podría abrir al público con visitas guiadas antes de que se complete lo estipulado en cuanto a recuperación, lo cierto es que el trabajo arquitectónico completo podría trascender a la gestión actual.
Para que se usará el edificio
Aunque el trabajo del equipo de Arquitectura a cargo puede variar según lo que se releve, la ley ya definió en que se deberá usar el edificio, la norma aprobada a fines del 2014 para la expropiación de la Confitería del Molino establece cuáles serán los usos de cada ambiente del edificio:
– La planta baja y el subsuelo deberá funcionar como una confitería, un restaurante o un local de elaboración de productos de panadería o pastelería. El formato del comercio es bajo concesión y de ese dinero se dispondrá el presupuesto para el mantenimiento y la gestión del histórico edificio.
-Otra parte del inmueble será destinado a un museo dedicado a la historia de la confitería y un centro cultural, el nombre lo define la ley: “De las Aspas”, en homenaje al ornamento que dio nombre al local, donde se expondrán obras de jóvenes artistas argentinos.
-En tanto que, los pisos superiores, «deberán consagrarse a actividades culturales, legislativas y de difusión de los valores del pluralismo y de la democracia”.