Icono del sitio NCN

De cara a un 2020 complejo y recesivo, sin viento de cola y con Latinoamérica en problemas

El Área de Economía del IAE Business School de la Universidad Austral dio a conocer la edición de noviembre del Informe Económico Mensual. Esta edición inicia con un análisis de Juan LLach sobre las adversidades del panorama global político-económico que deberá afrontar el nuevo gobierno, y una reflexión de Eduardo Fracchia sobre la «sorpresa» de los acontecimientos en Chile, el país de la región que se perfilaba como el mejor alumno según lo venían indicando la mayoría de sus indices. Martín Calveira revisa la coyuntura de la economía en el país, destacando similitudes y diferencias con antecedentes de crisis de nuestro pasado. Además del repaso habitual de los índices de la economía (precios, inflación, actividad económica, sectores fiscal, externo, monetario y financiero), también incluye un apartado con los resultados completos del sondeo que realizó el IAE entre sus alumnos y que fue difundido recientemente, sobre las expectativas político-económicas de los empresarios para el futuro próximo de la Argentina.

 La edición noviembre del Informe Económico Mensual que elabora el Área de Economía del IAE Business School de la Universidad Austral, volvió a poner énfasis en el peso del contexto internacional y realiza un análsis de las condiciones internas que caracterizan los desafíos para el nuevo gobierno.

«Por primera vez en sesenta y ocho años un presidente peronista, Alberto Fernández, asumirá su cargo en un contexto global desfavorable y teniendo que lidiar con males crónicos de la Argentina: la decadencia respecto de otros países, la alta inflación, el bimonetarismo más intenso del mundo y los problemas de endeudamiento y de una ajustada situación fiscal», destaca Juan José LLach en su Editorial.

«En 1952, con fuerte giro respecto de sus políticas anteriores, Perón lanzó un programa de shock que incluyó acuerdos (forzosos) de precios y salarios por dos años, apertura a las inversiones extranjeras, aun en petróleo, y un congreso de productividad. Las circunstancias actuales son distintas, pero tienen la crucial similitud de requerir un cambio profundo respecto de las políticas populistas tradicionales optando, en cambio, por un camino de desarrollo económico inclusivo y sostenible. Más allá de las ideologías, tal es la tarea. No se trata de copiar a un “país modelo” inexistente, sino de inspirarse en las mejores prácticas de los muchos países que lo han logrado», señala LLach.

En esta misma línea, Eduardo Luis Fracchia fundamenta la inexistencia de recetas infalibles que quedó en evidencia con los recientes acontecimientos en Chile, describiendo en el informe algunas de las posbiles razones de la crisis en el país vecino. «El hecho es una advertencia para la región, la más desigual del mundo. Hay que seguir investigando este proceso de violencia a un sistema que parecía estable y ejemplar. Por ahora para el gobierno chileno solo queda plantear políticas públicas que fortalezcan el estado bienestar», señaló.

Martín Calveira repasa características del actual contexto económico en relación a situaciones ya atravesadas y augura ciertas oportunidades en medio de la adversidad «La finalización de la gestión Macri y el inicio de Alberto Fernández se presentan en un entorno económico de grandes tensiones y desafíos que insumirán costos y esfuerzo. Sin embargo, se dispone de un conjunto de condiciones relativamente favorables: los beneficios comerciales del nivel de tipo de cambio actual, un mejor estado del sistema bancario en términos de liquidez y un gran avance histórico en el estado de la infraestructura doméstica. Todo esto conformará condiciones favorables y no menores para e futuro de la economía y la gestión política.» Y agrega: «El tipo de familia de crisis en la que estamos posee aspectos notoriamente distintos y favorables respecto a otras. Es posible que estemos ante una crisis que no tenga una tipología especial para tratarse de un episodio grave, similar al ocurrido durante los años 2001-2002».

Entre los principales rasgos de la complejidad del panorama 2020, Eduardo Fracchia señala en el informe:

«Estamos a la espera de un programa económico, pareciera que vivimos en una dinámica de construcción de un verdadero ´cubo mágico´ donde es un desafío llegar a un esquema coherente de la macro que suponga confianza a los mercados y que no implique deterioro del poder adquisitivo de la población que cedió 22% del ingreso real en estos cuatro años», concluye Fracchia después de sintetizar las diferntes variables.

PRECIOS y SALARIOS

Respecto a precios y salarios, la dinámica inflacionaria y salarial da señales de la necesidad de políticas de estabilización y de ingresos, y entre las principales consideraciones Calveira señala:

ACTIVIDAD ECONÓMICA

En cuanto a la actividad económica, se repasan algunos índices del pronóstico recesivo en el contexto de crisis:

SECTOR FISCAL

Sobre el sector fiscal, Calveira señala que la perspectiva sobre el objetivo de equilibrio de las cuentas fiscales es matizada con las nuevas prioridades dadas por la estanflación económica. La convergencia al equilibrio fiscal continúa enfrentada a dificultades desde la coyuntura socioeconómica.

SECTOR EXTERNO: BALANZA COMERCIAL Y CRISIS CAMBIARIA 

SECTOR MONETARIO Y FINANCIERO

Las tensiones cambiaras y financieras continúan presentes en la transición política. La decisión de la autoridad cambiaria de profundizar el control cambiario se realizó en el marco de potenciales salidas de capitales.

 

Salir de la versión móvil