4 de mayo de 2024

NCN

Para que el ciudadano tenga el control.

Cristina Kirchner retomó el diálogo con Alberto Fernández tras su descompensación en Bali

El presidente Alberto Fernández padeció una gastritis erosiva con sangrado y debió ser asistido de urgencia en un hospital de Indonesia. El estado de salud del mandatario encendió las alarmas y provocó que se reactivara el diálogo con la vicepresidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner. Ese episodio generó un acercamiento entre los máximos referentes de la coalición de gobierno que encabeza el Frente de Todos.

La vicepresidenta llamó al jefe de Estado para preguntarle por su estado, luego de que se conociera que debió ser atendido en un hospital de Bali por una gastritis erosiva que le generó sangrado y baja de presión.

Cerca de las 10 de la mañana (23 horas en Indonesia), Cristina Kirchner se comunicó telefónicamente con Alberto Fernández para preguntarle cómo se encontraba de salud y desearle una pronta recuperación. La corta charla se produjo luego de que el jefe de Estado ofreciera una conferencia de prensa en donde brindó detalles del percance de salud que sufrió, en el marco de la Cumbre del G20.

Tuve esta mañana una descompensación producto de una gastritis erosiva, que generó un sangrado que generó una baja de la presión importante”, explicó Alberto Fernández. “Para verificar exactamente el nivel de sangrado nos trasladamos a un hospital de Bali al solo efecto de hacer una endoscopía. Cuando terminamos eso, hicimos un ratito de tiempo para la reunión con Xi Jinping, donde definitivamente quería estar. Les agradezco a todos por la preocupación, estoy bien, estoy trabajando bien”, completó.

A las 9 del martes en Bali (22 horas del lunes en Argentina), el presidente llegó al centro de convenciones ubicado en el hotel The Apurva Kempinski. Tras posar para la foto oficial con su par de Indonesia, Joko Widodo, se dirigió hacia una carpa abierta y, agobiado por el intenso calor, comenzó a sentirse mal. Solicitó la asistencia de su médico Manuel Estigarribia, quien pidió una ambulancia al gobierno de Indonesia que marchó a toda velocidad al hospital General Sanglah.

En mencionado centro de salud, el mandatario argentino fue sometido a una endoscopía y luego de un rato de reposo, pudo cumplir con el compromiso al que no quería faltar. Se trató del encuentro con el líder chino Xi Jinping. Un rato después recibió el llamado de Cristina Kirchner que cayó muy bien en la comitiva.