26 de abril de 2024

NCN

Para que el ciudadano tenga el control.

El FPV pudo aumentar su fortaleza en el Senado

Con el 97 por ciento de los votos escrutados en forma provisoria, la Cámara de Senadores renovó su conformación actual. Si bien cambiaron algunos nombres propios, la relación de fuerzas no varió contundentemente. A diferencia de Diputados, el oficialismo ratificó su condición de partido mayoritario e incrementó su poder. Después del 10 de diciembre, el Frente Para la Victoria tendrá 38 legisladores propios que se estiran a 42 escaños al computar los aliados habituales.

La cámara alta dirimió la representación por las provincias de Catamarca, Córdoba, Corrientes, Chubut, La Pampa, Mendoza, Santa Fe y Tucumán. Las bancas disputadas corresponden a la elección legislativa de 2009. El oficialismo obtuvo 11 de los 24 puestos.

El FPV había puesto en juego 8 bancas, entre aliadas y propias. Pudo retener todas e incrementó su representatividad con dos legisladores más. De esta forma se convertirá en un eventual punto fuerte en caso de que Daniel Scioli triunfe en el balotaje o una necesidad de consenso si gana Mauricio Macri.

A partir del 10 de diciembre, el bloque que preside Miguel Pichetto no solo seguirá teniendo la llave para aprobar proyectos de ley y para determinar el inicio de sesiones sino que incrementará su peso a la hora de tomar esas decisiones.

Si bien la selección de legisladores para la cámara alta se dirime a nivel provincial en una categoría independiente del Ejecutivo Nacional, va en la misma boleta que el aspirante a la Casa Rosada y arrojan una vinculación íntima entre ambas candidaturas.

Gracias al mecanismo de distribución de los cargos (dos para la mayoría y uno para la segunda fuerza), el triunfo de Scioli, aunque haya sido por 2 puntos, se tradujo en un alza en la representación en el recinto que conduce, hasta fin de año, Amado Boudou.

La alianza Cambiemos, integrada por el PRO, la Unión Cívica Radical y la Coalición Cívica ostentará 15 legisladores, de los cuales 4 responden directamente al macrismo. La UCR y la CC mantendrán 11 escritorios tras haber puesto en juego 9, de los cuales pudo sostener 6. En tanto que el PRO, que no dirimió ninguna de las 3 bancas que tenía, incrementó su fuerza específica en un legislador.

El peronismo disidente pudo subir el número de referentes en la cámara, aumentando a 10 (retuvo los tres puestos en cuestión y amplió en dos su grupo de legisladores).

Siguiendo la lógica de las elecciones presidenciales y su repercusión en Diputados, el interbloque de la centro izquierda, representado por el Partido Socialista y el GEN, pagó caro los dos puntos que cosechó a nivel nacional: Perdió las tres bancas que jugó.

Deja una respuesta