28 de marzo de 2024

NCN

Para que el ciudadano tenga el control.

Emilio Monzó: «Hay que corregir los errores no forzados, la imagen del presidente cayó”

El presidente de la Cámara de Diputados dio definiciones sobre las elecciones legislativas que se vienen, destacó la presencia de Carrió y admitió: «Hubo un exceso de creer que tenemos el mejor equipo».

El diputado estuvo en Intratables, donde dio su visión sobre las posibles candidaturas del oficialismo y la oposición aseguró que la diputada Elisa Carrió «es el comodín de Cambiemos» y que «debe ser candidata» ya sea en la Provincia o en la Ciudad de Buenos Aires, ya que «hay que trabajar inteligentemente con la legitimidad que tiene ella». Además, opinó sobre la presencia de la líder de CC ARI dentro de Cambiemos: «Lilita no va a romper con Cambiemos. Me consta por las charlas que he tenido con ella personalmente. Lo que quiere Carrió al igual que yo, es que en la provincia de Buenos Aires no fallemos. No tengo nada contra Jorge Macri. Lo que quiero es que en la Provincia vaya el candidato que asegure el triunfo del gobierno nacional». Y agregó: «Más protagonismo que el que tiene Carrió es imposible. Trasciende fronteras. Todo es una encrucijada. Si perdemos con Jorge Macri, pierde un Macri».

Monzo

En cuanto a los posibles candidatos de la oposición, el titular de la Cámara remarcó que «hay un Florencio Randazzo que está avanzando», y consideró que «hay que ver si juega Sergio Massa y Margarita Stolbizer, se habla de Lavagna», y manifestó que «todas las figuras políticas de la oposición, son figuras muy conocidas y de peso». También reflexionó sobre una posible interna entre Randazzo y Cristina Kirchner: «Se puede llevar la atención del electorado, y eso puede ser perjudicial para nosotros. Todo es relativo. A lo mejor Randazzo no tiene techo y puede atravesar ese techo que no puede Cristina, Pero a lo mejor no llega al piso sólido que tiene Cristina».

Por último, Monzó tuvo autocrítica de las decisiones de Cambiemos: «Hubo un exceso de creer que tenemos el mejor equipo. Nos pasa a todos los que fuimos funcionarios en el Ejecutivo. Queres, a veces, traer el primer equipo y crees que estas colocando los jugadores en el lugar que tienen que jugar. Y cuando empezás a transitar el partido, con esa expectativa de que tenes los mejores jugadores, te das cuenta que el 4 no es 4, que el 10 no es 10, que tenes que empezar a hacer cambios o que no están para jugar esa liga».