18 de mayo de 2024

NCN

Para que el ciudadano tenga el control.

“En 2017 estaba bien tirar piedras y ahora la vicepresidenta está preocupada”

Luego de algunas semanas de silencio, Mauricio Macri brindó una entrevista y criticó la administración de Alberto Fernández. En diálogo con LN+, el ex presidente habló de diferentes temas, entre ellos el ataque al despacho de CFK.

El ex mandatario lo comparó con lo ocurrido en 2017 cuando en el Congreso se trataba la reforma previsional. “En ese momento estaba bien tirar piedras y ahora la Vicepresidenta está preocupada. No se preocupó tampoco por los policías. Rechazo visceralmente ese tipo de violencia, pero me genera repudio que ella se pone en protagonista cuando hubo cinco policías que fueron a un hospital, dos de ellos mujeres”, dijo.

“Hay gente que piensa que la policía no son seres humanos, que están para que inadaptados los agredan. Esto se termina si los que hacen estas cosas van presos”, agregó en la entrevista con Eduardo Feinmann y Jonatan Viale.

“Es una habilidad que tiene victimizarse y siempre giran la cosas de victimarios a víctimas. Siempre hay alguien externo que no les permite, los boicotea, pero se boicotean ellos mismos con esas ideas anacrónicas que no funcionan en ninguna parte. Sistemáticamente atacan los cimientos de una sociedad organizada”, consideró.

Al ser consultado por la crisis en el Frente de Todo, Macri dijo: “No sabe dónde pararse. Su único objetivo era lograr la impunidad sobre los zafarranchos que se le endilgan y después torturarme a mí. Eso ve que no le ha funcionado porque hay un sector de la justicia que resistió con dignidad. Las fórmulas fantasiosas de gastar sin límite y prometer lo imposible te chocan contra la pared. Puede creer que hay una alternativa pero es muy minoritario. El nivel de entendimiento de la gente hoy no es el mismo que el que tenía hace cuatro años”.

En otro momento de la charla, el líder del PRO se refirió al FMI y defendió el acuerdo contraído durante su mandato por más de 44 mil millones de dólares.

“La Argentina tuvo que tomar deuda porque heredamos un déficit fiscal monumental. La gastamos en reemplazar deuda que ya tenía la argentina. El FMI no es el cuco, es el espejo en el que los argentinos no nos quisimos mirar porque son los otros países. Te dice que te tenes que arremangar, que no podes pedir prestado. Esos países nos dieron una mano enorme para ver si podíamos continuar en el rumbo que íbamos”, explicó.

 “Hubo gente que se tentó con la musiquita del asado gratis y soluciones fantasiosas y volvimos para atrás. Pero la realidad es que el mundo nos ayudó, era ventajoso para la Argentina tomar el préstamo del FMI”, dijo en referencia a la campaña del Frente de Todos.