28 de abril de 2024

NCN

Para que el ciudadano tenga el control.

Histórico| Comienza el Juicio por abuso sexual contra un ex Diputado (video)

Todo ocurrió el 11 de noviembre de 2016 en el anexo H. Agustina Poch trabajaba junto a la entonces diputada Gabriela Troiano en el Congreso de la Nación. Ese día el entonces también diputado nacional por Tucumán, José Orellana, la invitó a ingresar a su oficina.

La victima lo relata en primera persona: “Fue el 11 de noviembre entre la 1 y las 2 de la tarde. Lo recuerdo porque era el Día del Empleado Legislativo. Ese día no hubo asueto. Recibí el llamado telefónico de la empleada de seguridad de abajo, diciéndome que no se podía contactar con la oficina de Orellana y que había gente que quería ingresar. Dejé el teléfono descolgado y fui a la oficina del diputado. Estaban él y su secretario. Saludé y entré, y el secretario se fue”.

Luego, explicó que “hubo un ida y vuelta donde él (Orellana) me tomó de las manos, me preguntó cómo estaba, porque se había enterado de que ‘no me la estaban haciendo pasar bien’, que necesitaba alguien que me quiera… Me dijo ‘me encantás desde el primer día que te vi’ y me hizo anotar su número de teléfono. Me dijo que le escribiera, que le contara cómo estaba. Que me veía mucho más flaca. Que estaba nerviosa y que bajara la ansiedad”.

“En ese momento le dije que me iba. Me dijo ‘vení’, me dio como un abrazo y varios besos en el interior de la oreja izquierda, mientras me decía que nadie me había besado así. Yo le dije ‘no, claramente no’ y me fui de su despacho», relató.

Al salir, la empleada rompió en llanto. Con el apoyo de Troiano, llevó el caso a la Justicia, con querellantes como María Elena Barbagelata y el apoyo de la UFEM, el ala de la Procuración dedicada a delitos de violencia de género, con el expediente que recayó en el Juzgado N°6.

 

Cuatro años despues, La jueza Alejandra Provitola, titular del Juzgado Nacional en lo Criminal N°6 declaró clausurada la instrucción de la causa  por presunto abuso sexual y la remitió a Mesa de Sorteos de Tribunales Orales donde fue elevado a juicio, en un hecho inédito en el país.

Vale recordar que la provincia de Tucumán ostenta el oscuro récord de ser la provincia con más parlamentarios acusados de violaciones y abusos sexuales. En la misma senda se encuentran el senador José Alperovich, los legisladores Ricardo Bussi y Horacio Vermal.

Alperovich pidió licencia en el Senado mientras es investigado por la justicia. Bussi y Vermal continúan en sus cargos.

Por su parte, Orellana, ya no ejerce su cargo en la Cámara Baja pero es el  actual intendente de Famaillá.

Reparación para la denunciante

E 2020 La Comisión de la Mujer de la Cámara de Diputados de la Nación resolvió realizar una reparación histórica para con la vícitma: «Reparamos para construir un Estado sin violencia», enfatizó en un comunicado.

«Hace algunos años, una trabajadora de ésta Cámara de Diputados de la Nación denunció haber sufrido abusos sexuales por un entonces diputado nacional, que está procesado por ese delito, y no encontró la protección física y psíquica que amparada por la Ley debería haberle garantizado ésta Cámara», reza el comunicado de Diputados.

En ese sentido, se afirma que «desde el inicio de la actual gestión, la defensa por los derechos humanos de las mujeres y personas de la diversidad sexual es un eje fundamental para nuestra política, por eso creemos que tenemos que responder ante la inacción que ejerció la institución en aquel momento con un acto de violencia que hoy queremos reparar».

Tras confirmar su incorporación al Departamento de Géneros y Diversidad Sexual de la Cámara de baja de la joven, desde Diputados sostienen: «queremos un Estado diverso e igualitario que priorice las políticas públicas que estén enfocadas a terminar con la violencia contra las mujeres, lesbianas, travestis, trans, intersex y no binaries pero que además ese mismo Estado no se quien ejerza la violencia».

#Yositecreo

La jueza Provítola nunca le creyó a Agustina. Por eso, para visibilizar su caso comenzaron a utilizar el hashtag “yo si te creo”.

“Lo primero que pasa en una causa de abuso sexual es el descreimiento que se le tiene a la víctima. Por eso “yo si te creo” se transformó en una consigna tan fuerte y donde todas nos sentimos identificadas por la cantidad de veces que no nos creyeron”, contó la abogada sobre la elección de la frase.

Con motivo de la Ley Micaela, el canal de TV de la Cámara de Diputados realizó un video donde se ven bocas de mujeres que relatan hechos puntuales de violencia, acoso y abuso sexual. Para sorpresa de Agustina, utilizaron frases textuales de su caso. “Fue muy importante para ella. Sentía que alguien la había escuchado”.

Agustina se llamó Luz, para proteger su identidad y evitar la exposición. Cuando Thelma Fardin denunció a Darthes y se expuso ante los medios, Agustina llamó a su abogada y le dijo: “Yo también quiero dar mi nombre”. Ya no estaba sola.