19 de marzo de 2024

NCN

Para que el ciudadano tenga el control.

El Centro Simón Wiesenthal presentó su informe anual y hay «alarma» sobre “el virus del odio y el antisemitismo” en las redes- (VIDEO)

El Centro Wiesenthal realizó por primera vez en la Cámara de Diputados de la Nación la presentación de su informe anual sobre “odio en las redes y ciberterrorismo”.

El evento tuvo lugar el miércoles a las 18 y se transmitió en vivo a través del canal de YouTube de la Cámara Baja del Congreso. Contó con la participación  de Sergio Massa – presidente de la HCD. -; el diputado nacional Pablo Yedlin; el decano adjunto del Centro, el rabino Abraham Cooper; el director del Departamento competente del Centro, Rick Eaton; y el director del Centro para América Latina, el Dr. Ariel Gelblung.

El Centro Simon Wiesenthal, con sede en la ciudad estadounidense de Los Ángeles, es una institución dedicada a documentar la historia de las víctimas del Holocausto y lleva un registro de criminales nazis. Tiene su sede central en Los Ángeles y presenta anualmente su informe sobre odio en las redes y ciberterrorismo en el Congreso de los Estados Unidos.

Sergio Massa fue el encargado de la apertura del evento, que contó con el diputado tucumano Yedlin como anfitrión. “El Gobierno de Tucumán hace rato que conoce y sigue la tarea del Centro a nivel mundial. Por eso, en 2018 nos invitaron a que hagamos una presentación en la provincia y se generó un espacio donde estudiantes tucumanos ayudaron a investigar cómo se llevaba adelante el mensaje de odio en América Latina. Y por eso, también, este año el anfitrión es un diputado tucumano”, explicó el Dr. Ariel Gelblung.

Este nuevo informe incluye toda la nueva información que el Centro detectó respecto a cómo se modificaron y acrecentaron los mensajes de odio durante la pandemia, como un nuevo elemento para aprovechar las teorías conspirativas y tratar de encontrar culpables donde no los hay”, indicó Gelblung.

Atacar el discurso de odio y racismo en las redes es prevenir que se instalen, instauren, perduren y pervivan en nuestra sociedad la acción de aquellos que siembran el odio en la construcción de un camino que, cuando no se previene a tiempo, termina generando catástrofes. Algún día fue la señalización de un banco de plaza, otro día fue de un comercio, otro día fue de las actividades comerciales de un grupo de ciudadanos alemanes… Pero fueron todos pasos previos que terminaron generando el mayor genocidio de la historia de la humanidad”, destacó Massa en la presentación del evento.

Que esta institución tenga el trabajo y la seriedad de prevenir los discursos de odio en las redes sociales es ir a buscar en el origen a los violentos para evitarles el sembrar permanente de racismo que antes se utilizaban en los panfletos de difusión y hoy se utilizan en las redes sociales, que son nuestro nuevo vehículo de comunicación”, añadió Massa.

Además advirtió: “En el mundo democrático hay una dificultad: encontrar un límite entre los conceptos de libertad de expresión y discurso de odio. Claramente esta institución con su tarea nos ayuda precisamente a enfocar, encarar y dividir para que nadie sienta que el trabajo para eliminar el discurso de odio viole o vulnere la libertad de expresión”.

La investigación del Centro Simón Wiesenthal calificó las redes sociales más populares por su trabajo en términos de prevención de los mensajes de odio durante el último año, en el que todo el mundo debió confinarse a raíz de la pandemia del coronavirus. El documento arrojó resultados contundentes: ninguna logró sacar una “A”.

Rick Eaton, especialista en la materia, contó que la principal preocupación del Centro es Telegram: “La mayoría de estas compañías no tiene reglas discernibles sobre cómo tienen que ser utilizadas, qué contenido está bien, qué está mal… Y esto es una gran preocupación para nosotros”. Y agregó: “Nosotros miramos por lo menos 350 canales de Telegram y estamos descubriendo canales a diario. Y, a diferencia de la mayor parte de las compañías de las redes, no tenemos a alguien con quien hablar. Ni siquiera lo podemos discutir con alguien”.

El rabino Cooper por su lado, pidió a los funcionarios argentinos que “miren más profundamente estos problemas y analicen si las compañías de las redes sociales que tienen el permiso de operar en el país están haciendo todo lo que pueden como para degradar la capacidad de marketing de aquellos que están promoviendo el odio, la violencia y hasta el terrorismo”.

Destacó que la red social Facbeook permite “todo tipo de transmisión en vivo” incluyendo disparos, ataques a mezquitas y asesinatos de judíos. En cuanto a Twitter, indicó que usuarios en todo el mundo continúan publicando mensajes de odio.

En los últimos cinco años, los atentados terroristas etiquetados como de extrema derecha crecieron un 320% en todo el mundo, de acuerdo al Índice Global de Terrorismo, uno de los indicadores de referencia en la materia y que elabora el Instituto de Economía y Paz (IEP) y el informe del Counter Extremism Project apunta en la misma dirección.

Hay una cifra significativa: en solo tres meses, un grupo de 34 portales conspiracionistas sobre Covid-19 consiguieron 80 millones de interacciones en Facebook, según señala el informe de alerta de la ONU. Mientras tanto, la Organización Mundial de la Salud (OMS), tratando de proporcionar información verídica, solo consiguió 6,2 millones de interacciones.

La sede del Centro Simon Wiesenthal se encuentra en Los Ángeles. También hay oficinas internacionales en las siguientes ciudades: Nueva YorkMiamiTorontoJerusalénParís y Buenos Aires.

Deja una respuesta